27 enero 2009

UN CAFE POR LA MAÑANA

Tengo la sana costumbre de tomar café por la mañana temprano. Mientras espero que se enfríe un poco le echo un vistazo al periódico. Lo primero que miro es la fecha, no por saber el día en que estoy, si no porque se que es la única verdad que me voy a encontrar en toda la publicación.

Después de mirar la portada, detenerme en los artículos de opinión (si escribe algún conocido) y pasar rápidamente por la actualidad de la capital, llego a la sección de provincia. Hoy me encuentro con esta noticia:

Adjudicadas las obras de la cafetería del hospital del Guadiato

Claro que me tengo que parar a leer el artículo entero. Antes pienso”yo creí que al hospital le habían hecho la cafetería”, pero sigo leyendo.¡ OOOOOh sorpresa mía! ¡EL HOSPITAL NO TIENE CAFETERÍA, SE LA TIENE QUE HACER AHORA DESPUES DE LOQUE HAN TARDADO¡

Pero hombre bendito, ¿Qué pasa? ¿qué se han olvidado de la cafetería? Si es lo más importante en un hospital. Si no tiene cafetería díganme donde vamos a ir a buscar a los médicos, enfermeras y celadores. ¡Claro que tienen que hacer un cafetería como Dios manda¡

Le doy un sorbito al café. Aún está caliente.

“La empresa pública Hospital Alto Guadalquivir ha adjudicado a la empresa Cartuja Inmobiliaria, SA las obras de la cafetería y de un salón de usos múltiples, instalaciones que irán ubicados en el sótano del recién inaugurado hospital”

¡Que sí¡, que después de tanto tiempo de obras y el hospital nos lo han entregado sin cafetería. Eso si, ya puestos ahora le hacemos una salón de usos múltiples. Lo que en una obra se ha llamado siempre el “poyaque”.

Otro sorbito al café. Sigo leyendo.

Los trabajos, que tendrán un presupuesto que superará los 1,3 millones de euros (IVA excluido), deben estar finalizados antes del próximo día 31 de marzo, según se publicaba ayer en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía”

Espera que no se si lo he leído bien. “un presupuesto que superará los 1,3 millones de euros (IVA excluido)”. Que ven mis ojos 1,3 millones de euros, que con IVA se convierte en … espera que cuento, … 1x6: 5 y me llevo una, 1x1:0 y me llevo otra… ¡MÁS DE 250 MILLONES DE PESETAS DE LAS DE ANTES¡¡ 250 MILLONES DE PESETAS! A alguien le ha tocado una primitiva de las gordas, y no ha sido a mi.

¿Pero qué clase de cafetería van a hacer en el hospital? No tendrán que tirar medio hospital para hacer la cafetería y un salón, ¿no? Que empiezo a pensar, y si eso es nada más que para la obra cuando le quieran poner la máquina de café y las mesas y las sillas, sale la cafetería más caro que el hospital entero. Que me parece que allí nos van a hacer una sala de fiestas en condiciones y al lado un hospital por si alguno se pasa con la bebida. Si ya decía yo que tanto café no es bueno.

Ahora dejo el café ahí, ya veremos si luego me lo tomo. Sigo.

“El centro hospitalario del Guadiato se inauguró el pasado día 16 y en estos momentos se encuentra abierta solamente la zona de consultas externas, y no será hasta abril cuando dé comienzo la actividad en los quirófanos, momento para el cual la empresa quiere tener lista la cafetería. Las urgencias estarán operativas en el mes de junio."

En dos meses se van a gastar 250 millones de pesetas en una cafetería y en un salón. Mucho tendrán que correr. Si para gastar 7 millones que ha costado la obra del hospital han tardado ocho años... (cuenta, cuenta).Veras como con esta obra retrasan otra vez el hospital otros dos años. Pero si más o menos eso costó el salón que le ha pagado España a la ONU con sus estalactitas y todo. ¿Qué va a tener este salón? Ya me veo presentado el Certamen de Villancicos de este año en el salón del Hospital. Seguro que es más grande que el de La Cabaña.

Estoy deseando que abran las urgencias y los quirófanos. A partir de ese momento me voy a tomar el café de la mañana al Hospital, que tendrá por los menos 5 tenedores, ...y 3 cucharillas de café. Además, que a mi edad tengo que mirar un poco por mi salud, y entre el café diario y el “Diario”, que me da todos los días el café, me puede dar un infarto y mejor que me coja allí donde están todos los médicos… en la cafetería.

24 enero 2009

ESOS LOCOS BAJITOS

Los hijos. Ay los hijos. La mayoría de las veces están para comérselos, otras para habérselos comidos. Los padres, y las madres, saben de lo que hablo. No se les puede dejar ni un segundo solos, lo digo por noticias como esta.

Un bebé de once meses manda a su padre a la cárcel por tener 500 plantas de marihuana. El pequeño jugaba con el teléfono y marcó por accidente el número de la Policía, que se personó en la casa para ver si todo andaba bien

La Gendarmería Real de Canadá (GRC) fue alertada porque alguien llamó al 911 y colgó sin decir nada, por lo que la Policía acudió a la residencia de donde provenía la llamada, en la periferia de Vancouver, informó el agente Janelle Canning.

"El padre se sorprendió de vernos y dijo que no había llamado a la Policía", dijo Canning. Aún así, efectuaron una inspección rutinaria que llevó a la Policía a descubrir 500 plantas de marihuana en una de las dos habitaciones de la casa. El padre del bebé, de 29 años, fue detenido y se enfrenta a acusaciones de producción de estupefacientes. A partir de ahora, la custodia del bebé la tendrá su madre.

Pues que tenga cuidadito la madre…

Claro que después crecen, empiezan a vestirse raro y a peinarse de aquella manera y tu quieres que vayan a los mejores colegio y te encuentras con problemas como el que relata esta otra noticia.

El director de una escuela en Reino Unido ha vetado el acceso a dos alumnas rubias al considerar el color de su pelo "antinatural"

Según recoge la publicación Daily Mail el director de la escuela Rednock en Dursley, ha sido objeto de las críticas por parte de padres y alumnos después de prohibir a dos adolescentes acudir a la escuela por ser "demasiado rubias".

Raegan Booth de 16 años, y Aby Western de 15, dicen que fueron amenazadas con su expulsión por el director del centro si no se teñían el pelo castaño.

Las chicas dicen que se ven obligados a cumplir con el estricto código de vestimenta de la escuela Rednock. Pero las chicas defienden que el color de su pelo forma parte de los matices del rubio, según Raegan, "las normas de la escuela establecen claramente que el color del pelo de los estudiantes no podrá ser 'antinatural'". "Un pelo 'antinatural serían colores como el azul, el morado, el verde y el rojo brillante. El rubio es considerado un color de pelo natural y hay muchos matices".

El director afirma que debe seguir las reglas, sin embargo, algunos estudiantes opinan que estas restricciones afectan al desarrollo personal de los alumnos. Desde el centro se afirma que el código de conducta lleva vigente mucho tiempo y nunca ha generado problemas, aunque ya se ha preparado una reunión de padres para discutir algunos de sus puntos y hacerlos más claros.

Claro que nunca ha habido ningún problema. Hasta ahora no había habido en el colegio ningún director tan gilipollas como éste.

23 enero 2009

LAS COSAS DE LA VIDA

Hoy en el programa de Radio Peñarroya "Las Cosas de la Vida" tenemos una entrevista en exclusiva. Nada más empezar, hablaremos un ratito con la directora del Hospital de Valle del Guadiato. Quiero que nos cuente como es y como funciona ya y va a funcionar el nuevo hospital a tan solo una semana de que haya sido inaugurado. Anabel Romero nos enseñara el hospital y nos contará como espera que funcione.
Vamos a hablar con Ana Cobos, una belmezana que desde hace unas semanas trabaja en los informativos de TVE. A ver que nos cuenta de la vida de una periodista en televisoón.
Conoceremos los últimos detalle de la V Gala Tronío Cofrade, que se va a celebrar este sábado en el Centro Polivalente de Peñarroya-Pueblonuevo
Finalmente espero que el presidente del Consejo Local de Participación Ciudadana nos invite a la V Matanza Tradiciona, una fiesta que se va a vivir en la Plaza Jardín de Peñarroya durante todo el día del domingo.
Y eso, con un poquito de música que busque por ahí y de "la discoteca de Emilio", sera lo que podamos compartir de 8 a 9 de la tarde en "Las Cosas de la Vida" en Radio Peñarroya-Cadena SER en el 90.2 de FM. Os espero a todos.

20 enero 2009

CAMBIO DE PRESIDENTE

Yo también tengo que decir algo sobre lo que ha sido y será la gran noticia de la semana y casi de la temporada: El cambio de presidente. Como noticia no se puede comparar con ninguna otra. Es un acontecimiento que esperado y deseado no ha dejado indiferente a nadie, independientemente de los colores que cada cual defienda. Cientos de periodistas han estado pendientes de este momento y se ha escrito mucho y se escribirá mucho de lo ocurrido
Tenemos un nuevo presidente en la casa blanca. Ya digo que era deseado, y aunque el anterior fue elegido democráticamente siempre existieron dudas sobre la limpieza de esas elecciones. En su mandato una metedura de pata tras otra. Y aunque algunos pudieran llegar a concederle algunos logros, la gran mayoría estábamos deseando que llegara el día que dejara de ser el manda más. Su forma de actual ha sido negativa en todos los ámbitos, principalmente el económico. Se va en plena crisis tanto económica y social. Ni ha estado a la altura ni nos merecíamos alguien de su calaña.
En el otro lado está el presidente entrante. Su trabajo al frente de la casa blanca es la de llevar la paz social. Todos tenemos puestas grandes esperanzas en su labor. La principal labor que se le pide es que traiga la paz. Yo auguro que no le van a dejar trabajar y que desde el primer día las críticas van a ser proporcionales a las expectativas que ha levantado. En poco tiempo se le van a exigir resultados y si no llegan seguro que pronto estamos pidiendo su dimisión y seguro que empiezan a llegar sus sucesores. Pasará en pocos meses.
Bueno lo dicho, que por fin se ha marchado Ramón Calderón y tenemos un nuevo presidente en el Real Madrid, Vicente Boluda. Ahora veremos si se empiezan a hacer las cosas bien y llega la tranquilidad y empezamos a salir de la crisis en la que estamos inmersos los madridistas.
El Real Madrid es tan grande que a veces nos creemos tan importantes como cualquier imperio de la actualidad que cambia de presidente y todo el mundo está pendiente de ello. HALA MADRID

17 enero 2009

UNA PLACA

Una placa ha servido para sellar por fin una parte, grande a mi entender, de la historia de Peñarroya-Pueblonuevo. Con una placa se pone fin a muchos días de esperanza en el futuro. Con una placa en una pared se inaugura lo que ha servido durante mucho tiempo de sufrimiento a muchas personas que se marcaron en su calendario este día como la llegada a una meta, y que hoy han visto que el día ha llegado y no se han visto reflejados y reflejadas en esa placa.

No he visto tampoco yo la placa. Todavía no he querido ir a verla. Pero seguro que en ella se puede leer que el presidente de nuestra comunidad ha inaugurado el centro hospitalario. En la placa aparece el nombre de quien lo único que ha hecho por ese hospital es estar aquí una hora, de camino a Los Pedroches, para descubrir su placa.

Mi idea es que faltan placas. Muchas, que reconozcan a quienes han hecho a lo largo de mucho tiempo, mucho más que Chaves, por que el día de hoy llegara. Si tuviéramos que poner placas por todos, ese “hospital de pin y pon” no tiene paredes suficientes en las que cogieran.

Pero claro, la memoria es corta, sobre todo si han pasado tantos años. Ocho años. Pero las placas habrá que ponerlas. Podemos ponerlas. Recordad conmigo.

Una placa a los mineros. A los que lo fueron, a los que dejaron de serlo por que perdieron su trabajo, a quienes, hijos de mineros, no llegaron a serlo, porque aquí dejamos de ser mineros. Ellos, todos son los que han pagado el hospital y se merecen más placa que La Junta.

Otra, a quienes creyeron que era posible que se cumpliera la ilusión de toda una comarca y que vivieron la injusticia de que hace más de 30 años el hospital cogiera el camino equivocado.

Y otras muchas, a quienes, de una u otra forma han dado parte de su vida y su esfuerzo, aunque poco fuera, para que el hospital fuera un hecho.

Hoy no han salido en la foto, o por que no han estado o por que han sido apartados los que de verdad tenían que tener una placa. Una placa enorme, mayor que cualquier fachada de cualquier hospital del mundo. Son los que de verdad consiguieron ese hospital. En ella estarían representados sus nombres teniendo como fondo muchos sofocones, madrugones, días sin comer, horas bajo la lluvia, muchos kilómetros de ida y vuelta, horas de radio (dentro de la radio o escuchándola). Esos ni han tenido placa, ni casi nadie se ha acordado de ellos. Y sin embargo ellos debían ser los verdaderos protagonistas.

¿Dónde está la placa a las personas que durante muchos días se tiraban al campo y a la carretera para pedir su futuro? ¿Dónde está la placa que recuerda como un pueblo fue capaz de colapsar una capital pidiendo lo que hoy por fin es un hecho?¿ Dónde está la placa para quienes en coche fueron a Córdoba y por sus carreteras pedían lo que era de justicia? ¿Dónde está la placa que dice lo que costaron a sólo unos cuantos las famosas multas? ¿Y las placa para recordar el cabril, y las noches de frio, y los días de hambre, y las mañanas de niebla y el miedo de aquella última mañana? ¿Donde están las campanas de Peñarroya?¡Qué pena de placas! ¡Qué pena de memoria de un pueblo!

Seguro que las placas y la memoria se ha perdido. Tiempo ha habido. Ocho años. Ocho años menos ocho días. Desde aquel 24 de enero. Se ha perdido la memoria por el camino, como se han perdido muchas de ñas prestaciones de aquel hospital, y como se han cambiado muchas otras. Por eso es necesario que llegaran todas esas placas. Para que recordáramos de quienes era, como era y donde estaba ese hospital que tanto ha cambiando en ocho años.

Tampoco hubiera sido mala idea poner un panel con fotografías de todos aquellos momentos. Seguro que muchos estaríais en ellas. En unas o en otras, unos en más, otros en menos. Pero el presidente las hubiera visto y hubiera visto como algunos estamos muchos mas viejos y otros incluso nos han dejado, pero sobre todo hubiera visto lo que ese hospital le ha costado a algunos y los que otros son capaces de pagar o de cobrar por él.

Como he dicho, no he ido al hospital. La verdad es que un hospital es un sitio al que ni quiero y ni deseo que vayamos ninguno, ni para poner placas. Sin embargo, cuando vaya a verlo yo llevaré, aunque sea una simple hoja de papel. Simbólica y modesta placa para acordarme de los que de verdad hicieron posible que este hospital hoy esté hecho.

Por último, una placa. Esa pequeñita, que no quitara mucho sitio ni costara mucho dinero, por que estaría dedicada a quien desearía que mejor gastarlo en que ese hospital tuviera más servicios y más puestos de trabajo. Eso si, con letras bonitas y grandes que dejara en su sitio a quien de verdad ha dado parte de su vida por ese hospital y que le costó, y se sigue costando mucho, mucho más de lo que cualquiera hubiera podido dar. Una placa de reconocimiento, a quién ha después incluso ha tenido que aguantar que le llamaran ladrón, a quien de verdad hoy es el que más se ha alegrado y sin embargo tan solo unos pocos le han dicho “ese hospital es tuyo”. Tuyo y de los de verdad estaban contigo y con tu pueblo. Una placa en la que se leyera RAFAEL MUÑOZ. Detrás estarían los nombres de aquella “alineación titular”.

Yo, tal vez lleve una placa hecha en una hoja de papel, hecha a ordenador, o a mano. Y lo ponga a la entrada. Si todos los que estuvieron aquel 24 de enero gritando tenemos hospital hoy se acordaran y llevaran su folio, el hospital de Valle del Guadiato y el de sus ciudadanos se quedaría empapelado. Para eso hay que tener memoria y ser bien nacido.