CUANDO empiezo a escribir este artículo, lo hago con la sana intención de no querer molestar, ni lo más mínimo, a nadie. Pero a nadie de ningún sitio, de ninguna ideología, creencia o forofismo, ni que pertenezca a ningún grupo de personas que se pueda sentir ofendido por su profesión, sexo o entretenimiento. En ésta, como en todas las ocasiones que me siento delante del ordenador para rellenar las líneas de las que se compone el artículo, me asalta la duda de qué tema tratar. Esta vez el problema es mayor. Ya he dicho anteriormente que en esta ocasión pretendo conseguir que mis palabras no molesten a ningún mortal. Tampoco a los dioses. Nada más lejos de mi intención.
No quiero que se mal interpreten mis palabras anteriores. El que con este artículo que me preparo a escribir no sea intención del autor molestar a nadie, no quiere decir, ni mucho menos, que en anteriores reflexiones de éste que ahora escribe (yo) y publicadas en éste o en cualquier otro medio haya querido o pretendido molestar, ofender o malhumorar a alguien premeditadamente. Lo dejo claro desde un principio para que nadie que se haya visto reflejado en alguna de mis anteriores opiniones se sienta menospreciado ahora.
Así que la cosa es sencilla. Es necesario buscar el tema apropiado para no incomodar a nadie y que naturalmente la lectura de estas líneas no aburran al lector y enredarlo (permítanme la expresión) entre las palabras para que llegue en su lectura hasta las últimas líneas del artículo en las que dejaré clara mi posición en el tema en un principio escogido.
Como en el famoso chiste del camello en el que el pasajero descarta uno a uno los temas a tratar en su conversación con el dueño del camello para no importunarlo y que le obligue a apearse de la montura, uno a uno yo también descarto temas relacionados con la política, el futbol o cualquier otro deporte. Incluso tengo que descartar el pronunciarme sobre mis gustos sobre cualquier cosa, que aunque para gustos estén los colores siempre habrá alguien que se pueda irritar con míos.
Me tengo que dar por vencido. No soy capaz de escribir ni unas míseras líneas con la certeza de no desagradar a nadie. Incluso creo que con lo que hasta ahora he escrito seguro que alguien que se ha sentido fastidiado porque ha hecho el esfuerzo de llegar hasta aquí y finalmente no encuentra nada que sea interesante. También pueden manifestar su discrepancia los profesionales de la opinión escrita por el intento por mi parte de realizar su tarea sin documentarme suficientemente.
Como algo tendré que opinar, y aún a riesgo de bajarme del camello, diré eso de "pues si, pues si". Y a alguien habré molestado.
No quiero que se mal interpreten mis palabras anteriores. El que con este artículo que me preparo a escribir no sea intención del autor molestar a nadie, no quiere decir, ni mucho menos, que en anteriores reflexiones de éste que ahora escribe (yo) y publicadas en éste o en cualquier otro medio haya querido o pretendido molestar, ofender o malhumorar a alguien premeditadamente. Lo dejo claro desde un principio para que nadie que se haya visto reflejado en alguna de mis anteriores opiniones se sienta menospreciado ahora.
Así que la cosa es sencilla. Es necesario buscar el tema apropiado para no incomodar a nadie y que naturalmente la lectura de estas líneas no aburran al lector y enredarlo (permítanme la expresión) entre las palabras para que llegue en su lectura hasta las últimas líneas del artículo en las que dejaré clara mi posición en el tema en un principio escogido.
Como en el famoso chiste del camello en el que el pasajero descarta uno a uno los temas a tratar en su conversación con el dueño del camello para no importunarlo y que le obligue a apearse de la montura, uno a uno yo también descarto temas relacionados con la política, el futbol o cualquier otro deporte. Incluso tengo que descartar el pronunciarme sobre mis gustos sobre cualquier cosa, que aunque para gustos estén los colores siempre habrá alguien que se pueda irritar con míos.
Me tengo que dar por vencido. No soy capaz de escribir ni unas míseras líneas con la certeza de no desagradar a nadie. Incluso creo que con lo que hasta ahora he escrito seguro que alguien que se ha sentido fastidiado porque ha hecho el esfuerzo de llegar hasta aquí y finalmente no encuentra nada que sea interesante. También pueden manifestar su discrepancia los profesionales de la opinión escrita por el intento por mi parte de realizar su tarea sin documentarme suficientemente.
Como algo tendré que opinar, y aún a riesgo de bajarme del camello, diré eso de "pues si, pues si". Y a alguien habré molestado.
23 comentarios:
Plas, plas, plas.
eeeeehm?
eeeeehm?
Son aplausos Picalcan, aplausos, nada más y nada menos.
Me ha gustado mucho el post, y eso que no cuentas nada. No deja de ser una paranoia.
Pasate por aquí si te apetece: www.unpoquitodecarnaval.blogspot.com
Gracias por los aplausos. La idea era esa no contar nada, no era nada m�s que una cr�tica ir�nica a lo que les sucede a algunos cuando opinan u opinamos. Ejemplo el art�culo de Alberto de Otras 7.
Tengo la idea de hacer una votaci�n para elegir las 7 maravillas de bares de mi pueblo.
Lo que pasa es que votaria a todos.
Otra cosa, ya he pasado varia veces. Yo tambi�n soy un enamorado del carnaval, lo que pasa es que yo soy de alli y lo he mamada desde muy chico. Ya te contar� algunas cosas de carnavales.
Jajajajajaj!! IRONÍA y LUCHA, como en algún BLOG te califican.
Hablando de carnavales, este año salgo en una comparsa de aquí de Córdoba. JAJAJAJa
Pues no, pues no, y te bajas del camello que es mío. Por cierto, es camella.
Mira Pical, que sepas que yo estoy muy molesta con tu post. Ya sabes que soy mujer y claro, cortita de entendimiento, pero a lo que llego (poko poko) veo como entre líneas dejas caer insultos variados y una se siente ofendida. Eso que dices de la capa de ozono o de la transmigración de las almas, todavía tiene pase, porque lo dices muy fisnamente, si señor, pero vamos, el meterte con la labor que hacemos las malas, con nuestra manera de ser, es que clama al cielo. Luego está lo del camello o camella, que eso ¿qué coño es? que no me entero, soooo soo mala leche, y menos mal que no ha salido a relucir lo del elicoptero eso, ¿es el de Espe? porque es que si no tiro el ordenata por la ventana. En fin, que no esperaba esto de ti y espero que públicamente escribas y digas una disculpas, síiii, síiiii, que te disculpes por la afrenta a las malas, que no tienes otra forma de meterte con nosotras y lo haces con un post dañino, con la de gente que trabajamos por dar publicidad al trabajo de las malas y ¿para qué haces esto? pues claro, para dar publicidad a tu blog (que sabemos que cobras un huevo por ello) y para dar publicidad a los que me creía amigos (Berma, Rever, Fray Angelico, Diógenes, Antonio Jesús, Cobreitor y cía), si es que es verdad todo lo que diga la gente. Posss nene, sigue así, que la maldición de la nena verdosa caerá sobre ti, o también sabiendo donde vives y donde desayunas (y comes patitas de chipirones) iré con mi ejército de malas, armadas de pistolitas de airsoft, que no matan pero joden un rato. Bueno, pues ahí queda eso, para que luego digan que no escribo bien. Y punto.
Sabía yo que lo del camello o camella iba a traer polémica. Mira que pense en poner eso de camell@, pero se me olvidó. Bueno, también he recibido críticas del colectivo de camellistas, ya que parece que en mi artículo se adivina cierto animo de declarar a este colectivo como intolerante. No era mi intención referirme a las malas o a su trabajo, aunque es posible me haya salido una crítica insconsciente de su trabajo.
Por otro lado, me parece impresentable que las malas se dedique a espiarme, en todo caso, ya que saben donde desayuno y como que dejen pagadas una cervezas o vayan cuando esté yo alli pa invitarme.
Las malas estamos observando muy muy cerca... no se nos escapa nada.... je je je.... ah! y que sepas que ya estamos en contacto con la ong salven a la camella, y está muy cabreados/as también... si es que no pueeeee ser .... y que conste que no cuento otros sitios donde vas... ni con quien andas.... ni tampoco cuento a quien vi el sábado en el Mercadona comprando y una mujer le dijo una barbaridad... y la que compraba (con trenza y sillón propio) se quedó con la boca abierta....
Pues cuenta, cuenta. Sobre todo lo del sábado, que me interesa.
Por cierto, ya veo que obsevas muy de cerca, pero no dices nada de pagar las cervezas.
Te voy a tener que apunta al club de las malas... que sí, que verás como llegas una mañana a desayunar y te encuentras con el desayuno pagado... que stttttttressssss. Ajajá, pica la curiosidad del sabadete eh? pues primero ese post diciendo lo wapas y stupendas de las malas, disculpándote también con las camellas, explicando lo del elicotero y luego ya contaré lo otro...jejeje... la caló ay la caló
Pediré publicas disculpas a las camellas. De las bomdades de las malas, no hablaré, para dejar que sean valoradas en primera persona por quienes tengan el "placer" de conocerlas personalmente.
En cuanto a lo del elicotero (ya le falta la h y la p, como siga así se queda en ná) supongo que tu imaginación de dá para conocer de qué hablamos. Una larga explicación no será útil para quien no utiliza la imaginación. De todas formas, como una imagen vale más que mil palabras, dile a cobreitor que te haga un dibujito, a modo de viñeta de los principes, explicandote el "cotero" (todavía más corto). El seguro que pinta mejor que yo.
bueeeeeeeeeeno anda, hacemos las paces ¿vale? si no somos tan malas, fíjate que me sé yo de una mala que mañana te nombra en su columna de opinión de Diario Córdoba, ¿contará lo de las patitas de chipirones? ¿hará una crítica a tu alusión a las camellas? ¿hablará de algo ocultooooooo? ¿que será será? la respuestas está ahí fuera (vamos, mañana). Me han dicho que tu post no iba en contra la mala ni en contra de la capa de ozono, ni de las camellas, que es que no sé leer... será porque soy un híbrido...
bueeeeeeeeeeno anda, hacemos las paces ¿vale? si no somos tan malas, fíjate que me sé yo de una mala que mañana te nombra en su columna de opinión de Diario Córdoba, ¿contará lo de las patitas de chipirones? ¿hará una crítica a tu alusión a las camellas? ¿hablará de algo ocultooooooo? ¿que será será? la respuestas está ahí fuera (vamos, mañana). Me han dicho que tu post no iba en contra la mala ni en contra de la capa de ozono, ni de las camellas, que es que no sé leer... será porque soy un híbrido...
Seguro que tu has entendido perfectamente mi post, y me has seguido el juego. Mañana, como todos los martes, atento a las columnas de la mala y del revert. Mañana con más motivo.
Pero no te vuelvas pelota y cuenta lo del sábado. ¿A quién viste? ¿Quién dijo qué? y esas cosas. Quiero saber.
El post es magnífico y yo soy una mala un poco retorcida. Así que a criticar a los que nos critican, que coño! uiffff perdón. Ya te contaré lo del sábado, pero te puedo adelantar que la que compraba (lástima que no me dió tiempo a mirar la cesta, a lo mejor hubiera descubierto algo interesante, como que champú usa y esas cosas), tiene un sillón en el que yo he sentado mis malignas posaderas.
¡Ahora ya lo pillé!
¿siiiii? pues explicamelo q yo todavia no
Pues yo menos, sinceramente. Pero de las patitas de los chipirones con cervecita sí, cuando quiera ya sabes...
Para discurso de polític@, no está mal. Está claro que el calor afecta en la cabeza. ¿Has probado a salir a la calle con gorra, o sombrero? Muy ingenioso, la verdad, me ha gustado. Me ha recordado las noticias que se dan en verano en las "teles", que con tal de rellenar, te cuentan cualquier cosa.
Molt bonit su texte. Su doble papada me emociona. Tarambana de plastico y cirrosico en escabeche. Pulpitos maranghuitos africanos y potaje de endibias y coliflowers. Hasta que el que el fary nos separe. Ñ de españa, coño. Flotador reivindicativo y underground. Eres lo mejor de la life. Yo quiero verte danzare, rapichote, patibutet practica cuatro, cuernos de toro. Nostradamus (nustrasladamus) predijo tener suerte cortijo.Porque en un cortijo grande, el que es tonto se muere de hambre.
Publicar un comentario